CIERRE DEL PROGRAMA DE MENTORING

¿Cuándo es el momento de dar por finalizado el programa de mentoring? 

El programa de mentoring termina cuando se cumplen las condiciones del contrato firmado entre mentor-emprendedor-mentorDay al comienzo de la relación en la primera sesión de descubrimiento.

En el contrato se fijó una duración máxima de 12 meses, que puede prorrogarse excepcionalmente a petición de ambas partes. 

También puede terminarse cuando ambos consideren que se han conseguido los  objetivos. 

Cuando el mentor considera que su emprendedor dispone ya de todas las herramientas necesarias para abordar el desafío que le hizo entrar en el programa de mentoring porque las conoce, las ha interiorizado y las ha puesto en práctica consiguiendo los resultados deseados o bien, aunque no haya conseguido todavía esos resultados ya tiene las destrezas necesarias para seguir caminando en la dirección que se ha marcado hacia los objetivos deseados. 

The entrepreneur ha pasado por todas las fases del proceso y dispone de los  recursos prácticos y emocionales para continuar el viaje sin el acompañamiento del coach o mentor y este ya solo le aportaría una falsa seguridad o efecto placebo, un bastón que ya no necesita. 

En estos casos:

El coach/mentor valora que su propio rol al permanecer al lado del emprendedor obstaculiza la fase de enfrentamiento con autonomía e independencia a los retos que el emprendedor se ha propuesto. 

La figura del mentor tiene que retirarse poco a poco para que el emprendedor afronte el miedo y las inseguridades que puedan surgirle al no disponer ya de esa ayuda externa.

Superar ese miedo a enfrentarse a los retos sin el mentor y darse cuenta de que  efectivamente ha adquirido destrezas nuevas, es lo que hace al emprendedor adquirir seguridad, empoderarse y sentirse satisfecho del esfuerzo puesto en el proceso. 

La relación también puede terminarse cuando el emprendedor trae una situación diferente a la que está trabajando.

Cuando el emprendedor plantea una temática diferente al motivo por el que se inició el proceso de matching y búsqueda de un coach/mentor, estamos ante un indicativo de que el proceso ha llegado a su fin y de que hay que empezar la fase de cierre de manera siguiendo los pasos adecuados para hacerla. 

Hay que diferenciar entre un tema que en ese momento y de manera casual el emprendedor comenta porque es algo importante para él que le ha ocurrido y quiere compartirlo, pero no lo está exponiendo como tema a abordar y en ese caso solo es un comentario pasajero que el mentor tratará de reconducir hacia el motivo de trabajo para no perder el foco y cuando realmente el emprendedor abre otro tema completamente diferente para trabajar en la sesión. 

De igual forma, tampoco estaría incluido dentro de este supuesto el hecho de que el emprendedor expone una temática diferente a la pactada porque le incomode y quiera evitar abordar el tema central sobre el que están trabajando. 

Cuando hay falta de compromiso o feeling:

Cuando el mentor valora que el emprendedor no ha realizado las acciones con las que se ha comprometido o hay falta de motivación y excusas recurrentes, el proceso no evoluciona y es un motivo para  indagar en las causas, si realmente al emprendedor no le compensa el esfuerzo y eso se  refleja en su falta de compromiso en el esfuerzo.

Si el mentor no percibe implicación en el proceso deberá explicar la importancia de cumplir con el compromiso adquirido y cerrar en proceso improductivo, tal vez, para abordarlo en otro momento en el que se den unas circunstancias más apropiadas.

También, puede ocurrir que, a pesar, de la motivación y el deseo de trabajar  conjuntamente, no sé de el feeling necesario para que el proceso fluya eficazmente. 

En muy pocas ocasiones ocurre esto, puesto que el mentor pone en marcha todos sus conocimientos y habilidades para que se den las variables adecuadas y que haya una buena relación que favorezca el proceso pero, a veces, ocurre y hay que saberlo ver, aceptarlo y valorar que otra persona puede acompañar al emprendedor en su proceso, antes de que el emprendedor se quede insatisfecho y descreído de herramientas que realmente sí son muy eficaces pero que están siendo frenadas por una relación entre mentor y emprendedor que por motivos que se escapan a nuestro control no fluye como sería deseable. 

Documentación para cerrar el proceso de mentoring:

•  Pasar cuestionarios finales de evaluación al emprendedor. 
•  Pasar informes de resultados observados por el mentor. 

Puesto que es MUY IMPORTANTE la CONFIDENCIALIDAD, siempre que haya que pasar informes hay que ser cauto, hablar de generalidades y respetar los detalles y aspectos íntimos y personales del emprendedor y al mismo tiempo satisfacer la demanda de quien nos pide el informe.  

Los cuestionarios de evaluación final son un recurso visual práctico y poderoso que  nos permite comparar el lugar desde el que se partió al empezar el proceso y el lugar de llegada, valorar los cambios y la evolución apoyándonos en datos concretos.

Comprobación de aprendizajes al cierre

Para abordar el cierre cubrir varios aspectos: 

Hacer open questions al emprendedor sobre:

• ¿Cómo valora el trabajo realizado?.
• ¿De qué forma le están aportando a su vida personal y profesional?.
• ¿Qué cambios ha experimentado?.

Preguntas abiertas que le ayuden a reflexionar sobre la experiencia del programa de mentoring:

• ¿Cómo se ha sentido a lo largo del mismo?.
• ¿Cómo valora su evolución y los resultados obtenidos?.  

Hacer closed questions más concretas como:

• ¿Cuáles han sido los aspectos que más le han costado?.
• ¿De qué se siente más orgulloso?.
• ¿Qué herramienta le parece más útil de las aprendidas?.
• ¿Cuáles son sus siguientes objetivos en los que pondrá en práctica lo aprendido?.

Estas preguntas incitan al emprendedor a comprometerse con nuevos proyectos y a ir elaborando en su mente nuevos planes de acción.  

En este caso, ya no intervenimos, simplemente alentamos a desarrollar esos  proyectos, celebramos el éxito de todos los aspectos positivos que nos cuenten y animamos a seguir ejercitando aquellos que más le cueste, puesto que ya conoce las herramientas y es cuestión de seguir practicando hasta afianzar destrezas para seguir mejorando. 

Nunca cuestionaremos aquí sus impresiones, proyectos ni planes de acción futuros. 

Podemos también darle un feedbackevaluativo centrándonos en los aspectos que él ha valorado, pero afianzándolos con nuestras propias palabras.

Este gesto siempre refuerza, y a todos nos gusta que valoren y aprueben los resultados  positivos de nuestro esfuerzo. 

Hay que tener especial cuidado en no tratar de convencer al emprendedor de que sí ha conseguido mejoras en áreas que no menciona.

En todo caso, si vemos que olvida progresos, le preguntamos por cómo percibe el cambio en esos aspectos que creemos que sí ha mejorado y que sí valora haberlo hecho pero that sencillamente ha olvidado mencionar.  

Es interesante propiciar durante el cierre una aproximación sensible a la propia experiencia como emprendedor durante el proceso: cómo se ha sentido y el significado que el proceso por el que ha pasado tiene en su vida, lo que le ha impactado, lo que le ha despertado.