PAGO SIMPLE

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El pago simple es una forma de liquidación de la deuda que puede ser anticipada o aplazada y que no requiere de gestión bancaria de la documentación comercial. Esta forma de pago implica un riesgo para la parte que anticipa su obligación, ya sea el comprador que anticipa el pago o el vendedor que anticipa la entrega de la mercancía, debido a la falta de garantías suficientes.

La confianza entre las partes es un factor clave en este tipo de pago, aunque cuando no se dispone de ella, es recomendable obtener un sustituto bancario como una garantía o un crédito documentario.

En el pago simple, el comprador puede iniciar el procedimiento de pago enviando los fondos mediante una transferencia bancaria o enviando un mandato de pago que permita retirar fondos contra presentación (cheque) o a un vencimiento determinado (pagaré). Por otro lado, el vendedor puede iniciar la formalidad del pago mediante la presentación al deudor de un requerimiento de pago de carácter documental (letra de cambio) o no basado en documento (adeudo directo).

A TENER EN CUENTA

Es importante tener en cuenta que la falta de garantías suficientes en el pago simple puede aumentar el riesgo de impago y por lo tanto, es recomendable evaluar las posibilidades de obtener un sustituto bancario en función de la confianza que se tenga en la otra parte y del valor y complejidad de la operación comercial.

Ventajas del pago simple para el exportador:

• Es un método de pago sencillo y fácil de utilizar, sin necesidad de una documentación compleja o gestiones bancarias.
• Permite una mayor flexibilidad en las negociaciones comerciales, ya que las condiciones de pago pueden ser acordadas directamente entre las partes involucradas.
• No conlleva altos costos adicionales en concepto de comisiones bancarias o impuestos.
• En caso de tener una buena relación de confianza con el comprador, puede resultar un método rápido y eficiente de cobro.

Desventajas del pago simple para el exportador:

• Existe un alto riesgo de impago o retraso en el pago por parte del comprador, ya que no hay garantías adicionales como en otros métodos de pago.
• El exportador asume el riesgo de que la mercancía pueda ser entregada antes de haber recibido el pago.
• En caso de litigio o problemas en el proceso de cobro, puede ser difícil obtener una solución satisfactoria y rápida sin la intervención de un tercero.
• En algunos países o sectores comerciales, el pago simple no es un método de pago común y puede resultar difícil de utilizar.

Puede ser anticipado o aplazado. En realidad siempre hay una parte que anticipa su obligación, ya sea el comprador que anticipa el pago (pago anticipado), ya sea el vendedor que anticipa la entrega de la mercancía (pago aplazado). 

Naturalmente, la parte que anticipa su obligación (sea pago o entrega) incurre en el riesgo de que la otra parte incumpla la suya (sea entrega o pago).

El factor confianza es fundamental. 

El mecanismo de liquidación de la deuda, (anterior como posterior a la entrega) no implica ningún tipo de gestión bancaria de la documentación comercial, como sería el caso de las cobranzas o de los créditos documentarios (de ahí precisamente que se les denomine pagos simples) en contraposición a los pagos documentarios.

LA FORMALIDAD DEL PAGO SIMPLE PERMITE DISTINGUIR ENTRE VARIOS MECANISMOS DE LIQUIDACIÓN:

• El comprador inicia el procedimiento de pago, ya sea enviando los fondos por medio de una transferencia bancaria o enviando un mandato de pago que permite retirar fondos contra presentación (cheque) o a un vencimiento determinado (pagaré).
• El vendedor inicia la formalidad del pago mediante la presentación al deudor de un requerimiento de pago de carácter documental (letra de cambio) o no basado en documento (adeudo directo).

La utilización de pagos simples sin garantías suficientes es un riesgo para la parte que anticipa su obligación, (ya sea el pago por el comprador o sea la entrega por el vendedor).

La garantía puede ser producto del conocimiento y la confianza entre las partes, un activo de primer orden en toda relación comercial. Pero cuando no se dispone de él, no debe dudarse en obtener su sustituto bancario: una garantía o un crédito documentario.