COHOUSING

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Ya existe una alternativa a los asilos en Estados Unidos y Europa. El cohousing trata de las viviendas colaborativas y autogestionadas donde comunidades de adultos mayores deciden unirse para compartir y disfrutar de espacios comunes manteniendo la independencia en sus propias casas.

Los residentes pueden definir su propio modelo de convivencia para compartir algunas o muchas de las actividades vitales. Desde las más básicas como la gestión de la comunidad, la limpieza o el ocio, hasta la cocina, el cuidado de los niños, la jardinería, etc.

Los servicios comunes, con un marcado carácter socio-cultural, pueden incluir cocina, comedor, lavandería, guardería, enfermería, oficinas, talleres, sala de actos, habitaciones de invitados y viajeros, salas de juegos, gimnasio, ordenadores y multimedia, spa, invernadero, etc.

Origen

El concepto moderno nace en Dinamarca en los años 60-70, pasando posteriormente a otros países del norte de Europa y a Estados Unidos, donde se formaliza el nombre genérico cohousing para definir esta forma de organización del modo de vida y de la vivienda.

Funcionamiento

Hay distintas formas de plantear la propiedad. La más común es la cooperativa con cesión de uso. En la que la cooperativa es la propietaria y las personas tienen derecho de uso indefinido. Es un derecho que se puede transmitir por herencia y se puede vender a través de la cooperativa. Esto facilita la posibilidad de cambio de un cohousing a otro en función de las necesidades vitales en cada época de la vida.

El cohousing facilita la convivencia y la cooperación entre los residentes. Así como la centralización de equipamientos y servicios. Lo que termina aportando beneficios sociales, económicos y medioambientales.

¿Cuántas iniciativas Cohousing hay en España?

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El cohousing es una forma de vida en comunidad que se basa en la creación de espacios habitacionales colaborativos y sostenibles. Los grupos de personas interesadas en esta forma de vida se organizan para diseñar, construir y gestionar su propio complejo de viviendas, donde cada uno tiene su propio espacio privado pero comparte áreas comunes.

En una comunidad de cohousing, los residentes tienen su propia vivienda y, además, comparten espacios comunes como jardines, cocinas, salas de estar, talleres, etc. Esto fomenta la vida en comunidad, el trabajo en equipo y la colaboración, además de promover la sostenibilidad y la economía colaborativa.

Las comunidades de cohousing pueden ser de diferentes tamaños y estilos arquitectónicos, desde pequeñas viviendas unifamiliares hasta grandes edificios de apartamentos. Además, estas comunidades pueden estar formadas por personas de todas las edades y orígenes, desde jóvenes solteros hasta familias con niños y adultos mayores.

VENTAJAS DEL COHOUSING PARA LOS EMPRENDEDORES:

• Reducción de costos: Al compartir espacios y recursos, los costos de vida disminuyen significativamente.
• Fomento de la colaboración: El cohousing fomenta la colaboración y el trabajo en equipo, lo que puede ser beneficioso para los emprendedores que buscan establecer nuevas empresas o proyectos.
• Reducción del estrés: El estrés de la vida cotidiana puede disminuir al tener una comunidad de apoyo cercana.
• Fomento de la creatividad: Al vivir en un ambiente colaborativo, los emprendedores pueden encontrar inspiración y nuevas ideas para sus proyectos.

DESVENTAJAS DEL COHOUSING PARA LOS EMPRENDEDORES:

• Pérdida de privacidad: Al compartir áreas comunes y vivir en una comunidad, se puede perder cierta privacidad.
• Dificultades en la toma de decisiones: La toma de decisiones puede ser más difícil en un ambiente de comunidad, ya que cada miembro tiene su propia opinión y perspectiva.
• Compromiso y responsabilidad: Los emprendedores que viven en una comunidad de cohousing tienen una responsabilidad compartida en la gestión y mantenimiento del espacio.

En definitiva, el cohousing puede ser una opción interesante para los emprendedores que buscan un estilo de vida colaborativo, sostenible y comunitario. A través del cohousing, los emprendedores pueden reducir costos, fomentar la creatividad y el trabajo en equipo, y disfrutar de un ambiente de apoyo cercano.

El cohousing es una alternativa a los asilos y residencias para adultos mayores, que consiste en viviendas colaborativas y autogestionadas donde los residentes deciden unirse para compartir y disfrutar de espacios comunes, manteniendo la independencia en sus propias casas. Esta forma de organización del modo de vida y de la vivienda nace en Dinamarca en los años 60-70 y se ha expandido a otros países del norte de Europa y a Estados Unidos, donde se formaliza el nombre genérico de cohousing para definirla.

Los residentes pueden definir su propio modelo de convivencia y compartir actividades vitales, desde la gestión de la comunidad hasta la cocina, el cuidado de los niños, la jardinería y mucho más. Además, pueden disfrutar de servicios comunes, como cocina, comedor, lavandería, enfermería, oficinas, talleres, sala de actos, habitaciones de invitados y viajeros, salas de juegos, gimnasio, ordenadores y multimedia, spa, invernadero, etc.

Hay distintas formas de plantear la propiedad en un cohousing, pero la más común es la cooperativa con cesión de uso, donde la cooperativa es la propietaria y las personas tienen derecho de uso indefinido. Esto facilita la posibilidad de cambio de un cohousing a otro en función de las necesidades vitales en cada época de la vida.

En resumen, el cohousing facilita la convivencia y la cooperación entre los residentes, centraliza equipamientos y servicios, y aporta beneficios sociales, económicos y medioambientales. Es una alternativa innovadora y sostenible para vivir en comunidad y disfrutar de la vejez de una forma activa y participativa.